La piel recubre todo tu cuerpo, y está constituido por células que necesitan nutrientes (que nos aportan los alimentos que consumimos) y oxigeno.
La alimentación influye mucho a la hora de tener una piel bonita.
Limón, un poderoso astringente
¿Te salen granitos? Prueba con algo natural.
Aquí tienes 3 razones por las que optar por un tónico para la piel a base de limón:
- Astringente: contrae los poros de la piel y regula la secreción de grasa de esta.
- Antiseptico: desinfecta los granos.
- Cicatrizante: ayuda a borrar mas deprisa las marcas que dejan las espinillas.
Esta fruta tiene, entre otras propiedades, acción depurativa, facilitando la eliminación de sustancias tóxicas para el organismo.
Un zumo de limón al día ayudará a tu hígado a eliminar las toxínas.
Tomate para protegernos del sol
El tomate es rico en licopeno, el pigmento vegetal que le da el color rojo.
Este pigmento ejerce acción antioxidante impidiendo el deterioro del ADN de las células tras su exposición al sol ( según un estudio publicado en British Journal of Dermatology)
Nueces para un rostro más joven
Sus ácidos grasos insaturados, poliinsaturados y lecitina que favorecen la elasticidad de la piel. La vitamina E, que participa en la cicatrización de la piel y mejora la circulación de la sangre.
Papaya para el acné
Es rica en provitamina A, que nos ayuda a tratar la piel con eccemas o acné.
Zanahoria para una mayor firmeza Rica en vitamina A que normaliza la renovación celular de la piel, y mejora la producción de colágeno. Contribuye a una mayor firmeza de la piel.
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